Cada vez son más las parejas de novios que deciden celebrar sus bodas, en concreto la ceremonia, en lugares no tan convencionales. Si la tradición, tiempo atrás, mandaba boda por la Iglesia y convite familiar, el aumento de las celebraciones civiles ha dado paso a que cada vez haya más establecimientos que ofrezcan la posibilidad de casarse en sus instalaciones, como en nuestra finca.
Hay gran variedad para elegir, pero, sin duda alguna las fincas tienen muchísimas ventajas tanto para novios como para invitados.
Aquí te proponemos algunas de las muchas ventajas que tiene el casarse en una finca como Mi Cobijo.
Privacidad
El sitio no puede ser más privado, ya que una finca como Mi Cobijo está ubicado a las afueras, en terrenos apartados lejos de miradas indiscretas y sin posibilidad de que nadie moleste a los presentes.
Las vistas
Hay que reconocer que casarse rodeados de terrenos en plena naturaleza, con el verde como color predominante y por encima solo el cielo, es como poco increíble. De día o de noche da igual, el paisaje es inmejorable.
Las fotografías
Cualquier reportaje fotográfico que se realice en semejante escenario tiene todo lo necesario: un emplazamiento a la altura, el estilo y la elegancia de todos los presentes y la posibilidad de hacerse fotos en distintos espacios sin moverse del lugar. Cualquiera de los rincones guarda una fotografía espectacular.
Al aire libre
No todas las bodas tienen la opción de celebrarse en grandes terrazas. El miedo principal de las bodas celebradas en exteriores es la posibilidad de tener mal tiempo, en nuestra finca disponemos de zona interior también para que la lluvia no interfiera en la celebración.
Mismo emplazamiento
La comodidad es muy importante y el poder celebrar la ceremonia, las fotos, el banquete y el baile sin moverse del sitio es un plus añadido.
Decoración
Una boda al aire libre ofrece poder jugar más con las luces y los ambientes a través de la decoración a medida.